Luchadora social por los DD.HH, justicia y reparación. Presidenta Asociación de familias desplazados internos por la violencia política de Warma Picchu y miembro de la Asociación Nacional de Familiares de Secuestrados, Detenidos y Desaparecidos del Perú (Anfasep).
Nació en la comunidad de Usmay (Ayacucho) y en 1984 tuvo que huir de su pueblo con sus 2 hijos por la violencia del conflicto armado interno, luego del asesinato de su madre por Sendero Luminoso y la desaparición forzada de su hermano por los militares.
Después de más de 30 años, en diciembre del 2022 en medio de una crisis social y política en el Perú, su sobrino-nieto, José Luis Aguilar Yucra, joven padre de familia de 20 años, fue asesinado por una bala en la cabeza cuando volvía del trabajo en Ayacucho.
En la década de los 80, militantes del partido Sendero Luminoso mataron a Narcisa Yucra Romero de Aguilar, madre de Paula en la Pampa de Usmay. Nunca pudieron llevarse su cuerpo porque llegaron los militares y tuvieron que escapar.
Al poco tiempo, los militares detuvieron y desaparecieron a su hermano, sin ninguna razón, y nunca más volvieron a verlo, Paula tuvo que huir por el monte hacia Huamanga, capital de Ayacucho, con sus 2 hijos, en el camino el más pequeño se golpeó con una roca y falleció. Solo llegó con el mayor de sus hijos.
El 15 de diciembre del 2022, Paula recibió la noticia que su sobrino-nieto había fallecido producto de una bala en la cabeza cuando volvía del trabajo. Ese día se realizaba una protesta social en contra del gobierno, donde fallecieron un total de 10 persona en Ayacucho, producto de la represión de las fuerzas del orden.
Su sobrino, José Luis Aguilar Yucra, tenía 20 años y era padre de un niño de 2 años, que deja huérfano.